Los beneficios que proporciona el agua y la facilidad que significa tenerla cerca de donde la necesitamos, obliga a muchos pobladores a construir sus casas cerca de los ríos, lo que tarde o temprano trae consigo algún desastre, de grande o pequeña magnitud.
- “¡Qué bonito paisaje! Hace dos años me compré un terrenito junto al río, como mi familia está creciendo, voy a construir mi casita bien pegadita al río para que mi Antuquita siempre tenga agua para lavar” dice Tomás.
- Tomás ¿Has visto qué bonitas han quedado esas casitas que han hecho junto al río?
- Yo te voy a hacer una igualita en nuestro terrenito, así, pegadita al río.
Anita, la hijita de ambos, le dice a su amiga: - Mira Anita, mi papá va a hacer una casita allá, al final de este caminito, junto al río, cuando esté terminada te voy a invitar para nadar allí.
La amiga responde - ¿Junto al río? Mi papá no quiere que vivamos tan cerca del río.
Tomás comenta con sus amigos:
- “Ahora construimos mi casa y Juan ya me dijo para ayudarle a hacer la suya. La quiere aquí nomás, muy cerca de la mía, para ser vecinos. Somos amigos desde hace muchos años”.
Uno de ellos le dice:- “Yo también quisiera construir la mía pero he tenido demasiados gastos con la siembra de mi terrenito”.
- “Ahorra para tus materiales y entre todos la construimos aquí juntito, en este pedazo de tu terreno, cerca del río”. Responde él.
Ya al atardecer Tomás y Antuca conversan:
- Mira Tomás, el río es tan grande, qué bueno que ya tenemos la casa, ahora que está lloviendo no tendremos problemas con el agua, además dicen que este río nunca se ha secado.
- ¡Huy qué frío! Se viene un aguacero terrible, escucha los truenos.
- ¿Viste esos rayos?
- ¡Ya empieza a llover! Mejor entremos a la casa.
Ya es medianoche y hace como ocho horas que llueve, el río está creciendo y ¡cómo se escucha!
- ” ¡Dios! ¡¿Qué ocurre?! ¡No se ve nada allá afuera! ¿Qué golpea en la puerta?
- ¡Ayyy! ”
- ” ¿Qué pasa? ¡Tomás! ¡Tomás! ¡Luisa, Raulito, despierten! El agua se ha metido
- en la casa, su papá se ha golpeado y no lo puedo levantar, súbanse a la mesa.”
- “¡Tomás! ¡Contéstame por favor!”
Tomás había recibido un fuerte golpe en la cabeza que lo dejó inconsciente. Con la ayuda de los vecinos, lo trasladaron de inmediato a un área de salud.
Reflexiones
¿Qué normas de seguridad se deberían aplicar para casos como el del relato?
¿Qué acciones realizarías para prevenir los daños de un desastre similar?
¿Cuál es el peligro identificado?
¿Cuál es la vulnerabilidad que se tendría que analizar?
¿Cuál o cuáles son los riesgos que sufrieron?
- “¡Qué bonito paisaje! Hace dos años me compré un terrenito junto al río, como mi familia está creciendo, voy a construir mi casita bien pegadita al río para que mi Antuquita siempre tenga agua para lavar” dice Tomás.
- Tomás ¿Has visto qué bonitas han quedado esas casitas que han hecho junto al río?
- Yo te voy a hacer una igualita en nuestro terrenito, así, pegadita al río.
Anita, la hijita de ambos, le dice a su amiga: - Mira Anita, mi papá va a hacer una casita allá, al final de este caminito, junto al río, cuando esté terminada te voy a invitar para nadar allí.
La amiga responde - ¿Junto al río? Mi papá no quiere que vivamos tan cerca del río.
Tomás comenta con sus amigos:
- “Ahora construimos mi casa y Juan ya me dijo para ayudarle a hacer la suya. La quiere aquí nomás, muy cerca de la mía, para ser vecinos. Somos amigos desde hace muchos años”.
Uno de ellos le dice:- “Yo también quisiera construir la mía pero he tenido demasiados gastos con la siembra de mi terrenito”.
- “Ahorra para tus materiales y entre todos la construimos aquí juntito, en este pedazo de tu terreno, cerca del río”. Responde él.
Ya al atardecer Tomás y Antuca conversan:
- Mira Tomás, el río es tan grande, qué bueno que ya tenemos la casa, ahora que está lloviendo no tendremos problemas con el agua, además dicen que este río nunca se ha secado.
- ¡Huy qué frío! Se viene un aguacero terrible, escucha los truenos.
- ¿Viste esos rayos?
- ¡Ya empieza a llover! Mejor entremos a la casa.
Ya es medianoche y hace como ocho horas que llueve, el río está creciendo y ¡cómo se escucha!
- ” ¡Dios! ¡¿Qué ocurre?! ¡No se ve nada allá afuera! ¿Qué golpea en la puerta?
- ¡Ayyy! ”
- ” ¿Qué pasa? ¡Tomás! ¡Tomás! ¡Luisa, Raulito, despierten! El agua se ha metido
- en la casa, su papá se ha golpeado y no lo puedo levantar, súbanse a la mesa.”
- “¡Tomás! ¡Contéstame por favor!”
Tomás había recibido un fuerte golpe en la cabeza que lo dejó inconsciente. Con la ayuda de los vecinos, lo trasladaron de inmediato a un área de salud.
Reflexiones
¿Qué normas de seguridad se deberían aplicar para casos como el del relato?
¿Qué acciones realizarías para prevenir los daños de un desastre similar?
¿Cuál es el peligro identificado?
¿Cuál es la vulnerabilidad que se tendría que analizar?
¿Cuál o cuáles son los riesgos que sufrieron?
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